viernes, 26 de marzo de 2010

Largada

Como acá se inicia nuestro recorrido, será mejor que definamos algunas cosas.
All that is gold does not glitter,
Not all those who wander are lost;
The old that is strong does not wither,
Deep roots are not reached by the frost.
From the ashes a fire shall be woken,
A light from the shadows shall spring;
Renewed shall be blade that was broken,
The crownless again shall be king.
Es decir — de acuerdo con la traducción castellana corriente —
No es oro todo lo que reluce,
ni toda la gente errante anda perdida;
a las raíces profundas no llega la escarcha;
el viejo vigoroso no se marchita.
De las cenizas subirá un fuego,
y una luz asomará en las sombras;
el descoronado será de nuevo rey,
forjarán otra vez la espada rota.
Esta cita de Tolkien quiere indicar el  clima  que daremos a estas páginas.

¿Por qué  “Linux, y la diferencia ...” ?

Cualquier persona medianamente informada, sabe que el número de usuarios del sistema operativo GNU-linux se ha incrementado enormemente en los dos o tres últimos años?  ¿A  qué  deberíamos atribuir esta tendencia?
Por supuesto, habría muchas explicaciones posibles, y se escuchan — o leen — varias de entre ellas ...
Aquí vamos a hablar acerca de una posible explicación,  extraida de nuestra propia experiencia personal.
A ese efecto,  y en ánimo de servir de auxilio a quienes consideren la posibilidad de cambiar su sistema operativo,  vamos a examinar en cada entrega uno o más “estudios de casos”.
Mi respuesta, para la pregunta formulada más arriba, es que el número de usuarios se incrementa con una tendencia alcista cada vez más acusada  porque — paralelamente y con similar progresión — se han ido produciendo varios  cambios  de  mentalidad  (tanto en los responsables de las distribuciones, como en los desarrolladores del software).